lunes, 28 de diciembre de 2015

Mi abuela Luisa Bartús Loreto (1ª parte)

En una de las primeras entradas de este blog hablábamos que mi abuelo Juan Bocardo de Madariaga se quedó viudo con poco más de 20 años. Después de algunos años volvió a contraer matrimonio, lo hizo con Luisa Bartús Loreto, la única abuela que recuerdo. Sus últimos años de vida pasamos de llamarle abuela a llamarle "bisa", ya que llegó a conocer a varios bisniestos. Aquí la vemos con mi hijo mayor, Alejandro.

Mi abuela Luisa con Alejandro

Luisa Bartús Loreto nació en Cádiz el  20 de octubre de 1911. Murió a los 92 años de edad, el 8 de marzo de 2004.

Hija del empresario y político Eduardo Bartús Lobato (1870-1936) y de Luisa Loreto Cortés (nacida en Jerez de la Frontera, y fallecida el 10 de enero de 1915).

Era la más pequeña de 8 hermanos (Maruja, Luis, Eduardo, Carlos, José, Angeles y Emilio).

Aunque nació en una familia de la burguesía gaditana, las vicisitudes de aquellos años le hizo pasar (como a la mayoría de su generación) unos duros años de juventud.

Su madre falleció cuando Luisa sólo contaba con 4 años, desde entonces fue la hermana mayor, Maruja, la que se hizo cargo de los hermanos.

Su padre, Eduardo Bartús Lobato, era hijo de José Bartús Sola (fallecido en 1911) y de Carmen Lobato Aldecoa ( fallecida en 1906). No conoció, por tanto, a ninguno de sus abuelos paternos. 

Su padre heredó el negocio de sombreros del abuelo.  José Bartús Sola tenía dos hijos más: José y Mª Carmen. La tía Carmen casaría con Carlos Ravello y Aldecoa (1859-1938), Profesor de Náutica. De su tío José sólo sabemos que murió sobre 1932.

Ya en el Anuario del comercio, de la industria, de la magistratura y de la administración (1886, nº 17) de Cádiz, figuraba "Sombrereros: Bartus (José), Manzana, 1." 

También en Boletín del Colegio Pericial Mercantil de Cádiz de octubre de 1909 figuraba un anuncio de la sombrerería del abuelo de Luisa.

La fábrica de sombreros de Eduardo Bartús tuvo varias ubicaciones y socios, así lo hemos podido constatar en la publicación "Cádiz por dentro":









Paralela a su vida de comerciante, Eduardo Bartús participaba activamente en la vida política. Así lo demuestra que con tan sólo 14 años firmara junto a otros muchos alumnos del Instituto Provincial de Cádiz una carta a favor de la libertad de cátedra (carta dirigida al director del periódico El Globo, fechada en Cádiz el 21 de noviembre de 1884), y recogido en la siguiente publicación:



Ya con 41 años, y establecido como fabricantes de sombreros, se inició como masón.  En el Boletín Oficial del Grande Oriente Español de 29 de julio de 1912 (publicación sobre la masonería), se anuncia la solicitud de iniciación de Eduardo Bartús Lobato.




Para más información sobre la masonería consultar el enlace: Gran Logia de España

Al poco de quedar viudo, Eduardo Bartús volvió a casarse. De dicho matrimonio tuvo tres hijos: Ana, Guillermo y María. 

Éste hecho parece ser que no agradó mucho a los hijos de primer matrimonio y supuso una ruptura casi total en las relaciones entre ellos.

En años posteriores, ya con la Segunda República instaurada, Eduardo Bartús pasa a ser representante  de ayuntamientos (al menos hay constancia de que lo era del de Puerto Serrano en 1933) en la Diputación Provincial de Cádiz.

Fue fusilado el 18 de diciembre de 1936. Según consta en el sumario, bajo la acusación de masonería ("Sumario 796-45 contra Eduardo Bartus Lobato por delito de masonería"). Según consta en la documentación consultada, fue fusilado en los alrededores de la Plaza de toros. 

El 15 de septiembre de 1936 se publicó un primer decreto contra la Masonería, cuyo primer artículo dice así: «La Francmasonería y otras asociaciones clandestinas son declaradas contrarias a la ley. Todo activista que permanezca en ellas tras la publicación del presente edicto será considerado como reo del crimen de rebelión». Pero en esa fecha, muchos masones españoles habían sido ya fusilados.

Mi abuela contaba que su hermano Emilio consiguió que le autorizaran poder visitar a su padre el día antes de su fusilamiento. Fue el último familiar que lo vio con vida.

viernes, 18 de diciembre de 2015

Juan Antonio de Madariaga, primer Marqués de Casa Alta

Muchas veces el destino nos depara sorpresas. Cádiz en el siglo XVIII era polo de atracción de diversas corrientes migratorias, tanto nacionales (vascos, navarros, ...) como extranjeros (genoveses, franceses, ...). 

Ese fue el destino de nuestra familia: un genovés que llegaba a primeros del siglo XVIII buscando mejor forma de vida, y un comerciante vasco que hacía lo propio. Quizás hasta coincidieron en algún punto de la ciudad. Lo que no pasaría por sus cabezas, sin duda, es que dos siglos después sus descendientes formarían con su unión, la familia Bocardo de Madariaga.

Grabado de Cádiz siglo XVIII

Según nos relata el estudio "Una comunidad de comerciantes: navarros y vascos en Cádiz. (Segunda mitad del siglo XVIII):

"En el último cuarto del siglo XVIII llegaron a Cádiz los Madariaga. En primer lugar, en 1777 emigraron Juan Antonio y José Antonio Madariaga procedentes de Vergara, Guipúzcoa. Cinco años más tarde, Juan Ignacio Madariaga acudió a la llamada de sus hermanos."

Efectivamente, nuestro antepasado Juan Antonio de Madariaga y Aróstegui (Primer Marqués de Casa Alta) era uno de los cinco hijos de Andrés de Madariaga Franklin (1684-1747) y  Ángela de Arostegui Urza (1682-1755), familia acomodada de la burguesía vasca. 

Los cinco hijos fueron, María Ignacia (1709-1751), Juan Ignacio (1717-1771), Juan Antonio (1720-1797), José Antonio y Ana María.

En 1777 llegan a Cádiz Juan Antonio y José Antonio, en 1783 llega Juan Ignacio (famoso capitán de navío).

Sobre Juan Antonio, el libro referenciado comenta "Afincado en Cádiz, ocupó plaza como oficial de la clase de segundos de la Contaduría principal de Marina. Un poco más tarde, se hizo cargo del manejo y la administración del Oficio de Correo y Postas de Cádiz. En 1758 tomó el hábito de la Orden Militar de los caballeros de Santiago. Desde entonces se hizo cargo del cuidado de los derechos y patrimonios de la Casa Ducal de Arcos, en sus dominios territoriales de la Isla de León. Alcanzó el puesto de procurador mayor del cabildo gaditano. Finalmente obtuvo el título de marqués de Casa Alta".

A lo largo de su trayectoria política en Cádiz ocupo diversos cargos municipales: en 1770 Procurador Mayor, en 1779 Diputado del Común, en 1789 Procurador síndico personero (procurador que se nombraba por elección en los pueblos, y principalmente en aquellos en que el oficio de procurador síndico general era perpetuo o vitalicio), en 1792 Regidor electivo.

Es de reseñar que un grupo de individuos acapararon estos nuevos puestos; incluso es frecuente encontrar en los mismos cargos a los hijos, a pesar de que se accedía a ellos por medio de elecciones. Respecto al origen socioeconómico de los nuevos integrantes del Ayuntamiento gaditano, aunque estas elecciones ofrecían la oportunidad de que el pueblo participara en su órgano directivo, la evolución del cargo de procurador síndico personero demuestra que un grupo muy selecto de personas ocupó este oficio, la mayoría de los cuales procedía del mundo de los negocios. Además, hay que precisar que se trataba de la élite de los hombres de comercio, ya que cualquier comerciante no tenía acceso al cargo. Dentro del grupo de personas que ocuparon este asiento, dos consiguieron títulos nobiliarios al final de sus carreras: Landaburu y Madariaga.

Juan Antonio Madariaga, además de comerciante, era el Administrador General de los Oficios de Correos y Postas. Tenía contratados seis criados, lo que demuestra su capacidad adquisitiva.

En otro estudio consultado se comenta lo siguiente: 

"El Administrador de Correos de Cádiz en 1764 era Juan Antonio de Madariaga Aróstegui. Nacido el 16 de Julio de 1721 en la ante iglesia de Axpe de Busturia, perteneciente al señorío de Vizcaya, había contraído matrimonio en La Graña el 13 de Noviembre de 1752, trasladándose a Cádiz el siguiente año, ostentando el cargo de Oficial de la Contaduría Principal de Marina. El 3 de Febrero de 1755 se le encomendaba el Oficio de Correos y Postas de la Ciudad de Cádiz, y a partir de 1764 se encargó, además, de los derechos y patrimonios de la Casa Ducal de Arcos en la Real Isla de León.

El primero de estos cargos tenía especial significado. Aparte del objetivo primordial del Estado de conseguir una eficaz transmisión de órdenes, el aporte de datos que recibía el hombre de negocios a través de su correspondencia resultaba vital para el ejercicio de la actividad mercantil, constituyendo el canal de mayor significación para el conocimiento de los hechos que posibilitaran la planificación de sus proyectos. Por tanto, en una plaza como la ciudad de Cádiz tendría ese puesto una singular relevancia.

Juan Antonio lo desarrolló hasta el año 1786, en que pasaba a ser ejercido por su hijo Juan Felipe de Madariaga Arzueta. Durante estos años consiguió ser distinguido con el hábito de Caballero de Santiago en 1758 y con el título de marqués de Casa Alta el 16 de Febrero de 1775. Concedido por el rey Carlos III.

Su sucesor, nacido en la Graña en el año 1753, contrajo matrimonio en 1771 con Petronila de Llano Fernández, hija de Francisco de Llano San Ginés, conde de Torre Alegre, llegando a ostentar los títulos de su padre y de su suegro, además de conseguir el reconocimiento del monarca con la concesión, en 1789, de la Cruz de Carlos III. Gestionó la Administración de Correos de Cádiz entre los años 1787 a 1798, en que pasa a figurar como titular Antonio Ruiz de Mendoza hasta el fin del período considerado."

En el estudio "Comercio con América y títulos de nobleza: Cádiz en el siglo XVIII", explican la obtención de títulos nobiliarios. Perfectamente podría estar aludiendo al caso de nuestro antepasado Juan Antonio.

"El camino hacia la nobleza.

El tráfico comercial con América proporcionó los méritos, y sobre todo, los capitales suficientes para que personas relacionadas con él pudiesen iniciar un proceso de ascensión social que, en muchos casos, culminaba en la obtención de un título de nobleza.

El éxito en los negocios solía marcar el inicio de este proceso, que pasaba por unas etapas. Paso previo imprescindible era el reconocimiento de hidalguía. En el caso de los vascos la totalidad prácticamente de la población era hidalga, sólo debían ser admitidos como tales en las poblaciones donde se instalaban."

Sin duda, la sólida posición económica de Juan Antonio de Madariaga como comerciante con América, fue su principal baza para obtener la concesión de título de Marqués de Casa Alta por el rey Carlos III.

Antes del título de marqués lo fue de Vizcondado previo de Solares (como vizcondado previo se conoce a cada uno de los títulos de vizconde otorgados por reyes españoles antes de conceder dignidades de conde o marqués a los agraciados, esto como mandato del rey Felipe IV de España. Estos vizcondados se suprimían al mismo tiempo en que un título de conde o marqués era entregado a la misma persona beneficiada. El origen del mandato de vizcondados previos se debería principalmente a una cuestión de índole económica, ya que los impuestos recaudados tras esta regla aumentarían.

El 15 de octubre de 1631 Felipe IV ordena que no se despache ningún título de conde o marqués sin antes haber pagado la suma de setecientos cincuenta ducados por un título previo de vizconde que automáticamente debería dejar de existir.

Estos títulos no están acompañados del disfrute de rentas con las que mantenerlos, de manera que llega un momento en que los descendientes no pueden seguir sosteniéndolos. Quizás este fuera el caso de los descendientes de Juan Antonio, de hecho, abandonan pronto uno de los títulos (el de Conde de Torre Alegre). 

Y quizás, el no poder hacer frente al sustento que había que pagar a la Real Hacienda por mantener el mismo, supuso que no siempre lo ostentara el legítimo heredero, sino él que tuviera los recursos económicos necesarios para ello.

Nobles en el siglo XVIII



El apellido Madariaga

Apellido vasco de origen toponímico, relativamente frecuente y repartido por España, si bien se registra, sobre todo, en al provincia de Vizcaya, procedente del topónimo Madariaga, nombre de una población de Guipúzcoa y otra de Vizcaya, cuyo significado es el de “peral”. 

Sus más antiguas casas fueron la de Madariaga de Muxika, en Güernica (Vizcaya), y las de Madariaga-Azpikoa y Madariag-Gabaikoa, en Azkoitia (Guipúzcoa). Los Madariaga de Muxica, considerados los más antiguos de todos, edificaron una casa fuerte con foso y contrafoso, y participaron en las luchas de su época, siempre de parte del bando Oñacino. Dicha casa fue incendiada por los gamboínos, trasladándose los Madariaga a Axpe de Busturia, donde edificaron otra similar a la destruida.

De los Madariga de Anzuola procede la rama que pasó a Sevilla y de la que descienden los Marqueses de las Torres de la Presa y los de Villafuerte y los Condes de Casa Galindo y de Pestagua. Ante el Corregidor del Señorío de Vizcaya hicieron información de nobleza numerosos Madariaga, y otros lo hicieron ante las Reales Chancillerías de Valladolid y de Granada. La antigüedad de este linaje se halla documentada en Sancho de Madariaga, vecino de Legazpi, en 1407; Juan Sánchez de Madariaga, vecino de Azkoitia, en 1484, y Juan de Madariaga, vecino de Gabiria, en 1462. 

Armas.- Unos Madariaga: De azur, cinco roeles jaquelados de oro y gules, en sotuer, y entre ellos, cuatro estrellas de oro. Bordura de oro, con ocho eslabones de cadena, de azur.


lunes, 14 de diciembre de 2015

Desde el primer Marqués de Casa Alta hasta nuestros días

Desde pequeños, siempre hemos escuchado en casa que un antepasado nuestro fue un noble. Y así es, Marqués de Casa Alta y Conde de Torre Alegre son dos títulos nobiliarios que en su día ostentaron un familiar nuestro. 

Hoy os voy a llevar desde ese primer Marqués hasta nuestra abuela (o bisabuela para algunos) y en entradas posteriores os cuento un poco de cada uno de esos antepasados. 


sábado, 5 de diciembre de 2015

Los tiempos de Juan Bocardo Patrón

Juan Bocardo Patrón nació en Cádiz el 10 de enero de 1887, fue el mayor de 8 hermanos. Nació unos meses después del que fuera rey, Alfonso XIII. Por aquel entonces en España se vivía la regencia de Mª Cristina de Habsburgo-Lorena, viuda de recientemente fallecido Alfonso XII (1857-1885).


lunes, 23 de noviembre de 2015

De Filadelfia a Francia

Habíamos dejado a mi abuelo, Ramón Pidre, en EE.UU, país donde desembarcó en enero de 1925. No volvemos a tener noticias de él hasta junio de 1928, que embarca en Bilbao en el buque Elanchove.

Puerto de Cardiff (UK)





¿Qué pasó en la vida de Ramón durante aquellos años?  Pues no lo sabemos a ciencia cierta, pero imagino que andaría buscándose la vida y trabajando de aquí para allá. Lo que sí es cierto es que en 1928 estaba en Bilbao embarcado y comenzando una nueva etapa que le llevaría a países y puertos tan dispares como NewCastle, Cardiff, Blyth o Barry (UK), Hamburgo (Alemania), Gijón o Pasajes (España).


Puerto de Hamburgo (Alemania)












Como es natural en la vida del mar, los embarques y desembarques eran de tanto en tanto y en lugares muy remotos. Entre un registro y el siguiente, hay una gran diferencia no sólo de meses, sino de lugares geográficos. Por tanto, debía desplazarse en los medios de transporte de la época para poder visitar a su esposa Amalia en Santomé o para embarcar en otro puerto diferente.

No era una vida fácil. Había que “buscarse las papas” como fuera. El clima político en el país era bastante inestable. La dictadura de Primo de Rivera llegaba a su fin y  comenzaba su andadura la Segunda República. Nada ni nadie te aseguraba que tuvieras pan para el día siguiente. Ramón iba embarcando y desembarcando con más o menos asiduidad desde 1928 (que volviera de EE.UU.) hasta marzo de 1933 que desembarcó en Bilbao por “amarre” del buque “ULIA” de la Compañía Naviera Guipuzcoana, tal y como señala su libreta naval. Me gustaría que nos quedáramos con este dato.

Buque ULIA

En este momento de la narración quiero hacer una parada para explicar el nacimiento de la llamada Marina de Guerra Auxiliar de Euskadi. Ésta fue una de las unidades militares más singulares y peor conocidas de las que tomaron parte en la Guerra Civil de 1936-1939. Su dependencia exclusiva del Gobierno Vasco, le dio además una gran significación política. Fue creada en octubre de 1936 por la Consejería de Defensa del Gobierno Vasco para ayudar a la Armada Republicana en la protección al tráfico marítimo y a la actividad pesquera en aguas propias y mantuviera libres de minas submarinas los accesos a los puertos vascos. Para organizar esta fuerza auxiliar, Joaquín de Eguía, designado por el Gobierno Vasco para ser el jefe de esta flota,  convirtió en "buques de guerra" a un buen número de pesqueros que estaban refugiados en Bilbao, sin ninguna ocupación. (recordemos el dato anteriormente citado sobre “el amarre” en Bilbao del buque “ULIA”).
Les dotó de artillería en unos casos (bous armados) o de aparejos para el rastreo de minas submarinas en otros (dragaminas).
Las tripulaciones se organizaron con personal voluntario, procedente de las marinas mercante y pesquera. Más de 900 llegaron a pasar por las filas de la Marina de Euskadi.









Se ocupó de la escolta de buques mercantes y del rastreo de minas en aguas vascas, llevando el peso de la campaña naval en el bando republicano durante la primera mitad de 1937. La caída de Bilbao en junio de 1937 obligó a que los buques vascos se trasladaran a Santander, donde los dragaminas prosiguieron con las labores de rastreo. La evacuación de Santander en agosto de 1937, puso punto final a sus actividades. 
Algunos de sus integrantes cayeron prisioneros, pero la mayoría consiguió llegar a Francia. Aproximadamente la mitad de los llegados permanecería en suelo francés hasta el final de la contienda o, en algún caso aislado, pasaría a territorio franquista.

Y he aquí donde me gustaría contar un extraño y apasionante capítulo de la historia de Ramón.  Mi abuelo trabajó como fogonero en uno de estos buques que conformaban la Marina de Guerra Auxiliar de Euskadi, concretamente en el buque “IRIS”, rebautizado posteriormente con el nombre “D-12”. Cobraba 350 pesetas.
   
Podemos ver su ficha en una imagen posterior, que proviene de la web www.marinavasca.eu.

¿Puede que sea otro Ramón Pidre? Puede, pero es poco probable. En la libreta naval de mi abuelo hay un lapso de tiempo desde 1933 hasta 1939 en el que no aparece ni un solo registro. A esto debemos unir que las letras “Fog.”, que aparecen en la ficha, significa “Fogonero”, la profesión que siempre ejerció cuando estuvo embarcado en algún buque.



Como decía, el buque donde trabajó se llamaba “IRIS / D-12”, construido en 1933 en Pasajes (País Vasco). Huido a La Pallice (Francia) el 25 de agosto de 1937. Retirado de la Marina Auxiliar en noviembre de 1937 y requisado por orden de la Justicia Francesa  en 1938 (Rochefort).

Donde iba el buque, evidentemente iba mi abuelo y toda la tripulación. Como señalaba, fueron evacuados de Bilbao, Santoña, Santander y de allí a tierras francesas. 550.000 personas se refugiaron en Francia durante y tras la Guerra Civil. Sabemos que el dragaminas D-12 llegó a La Pallice (Francia), pero no tenemos datos a ciencia exacta en qué ciudad estuvo mi abuelo hasta enero de 1939, cuando volvemos a tener noticias de él gracias a su libreta naval. Todos estos vaivenes en un buque del bando republicano trajo consigo efectos negativos a mi abuelo. Cuando quiso (o pudo) volver a España, fue sometido a lo que entonces llamaban “Expediente de Depuración”, instruido por la Ayudantía Militar de la Marina de Marín (Pontevedra). Era una especie de “comprobación” de tus ideales. Entre algunas medidas tomadas en el inicio de dicho proceso, se encontraban la toma de huellas dactilares y la prohibición expresa de salir al extranjero.

Finalmente, mi abuelo “superó” el expediente y fue liberado de toda sospecha por el régimen de Franco. Continuó trabajando como fogonero, lo que siempre había sido, hasta abril de 1941.



Inicio (imagen 1) y fin (imagen 2) del expediente de depuración al que se vió sometido mi abuelo, Ramón Pidre 

CONTINUARÁ...

P.D.: Quiero agradecer a José Cidrás Pidre toda la información facilitada.

sábado, 21 de noviembre de 2015

La bisabuela Beatriz de Madariaga García

A mi bisabuela, al contrario que con mi bisabuelo, no llegué a conocerla; pero sí que mi madre me ha hablado bastante de ella. Le pusieron el nombre por su abuela, Beatriz Freddy López.

Nació en Osuna en 1892, y murió en Cádiz el 19 de febrero de 1949. Hija de Rafael de Madariaga Freddy y Matílde García Torres. Su padre, Rafael de Madariaga, era militar (carabinero). En un periódico de la época aparece una citación para que el licenciado de la Armada Rafael Madariaga Predy se presente en la sección de Alcaldía.


lunes, 28 de septiembre de 2015

De Santomé a Filadelfia

          Mi abuelo, Ramón Pidre, nació el 4 de enero de 1902 en el lugar de Cernello, perteneciente a la Parroquia de Santomé de Piñeiro (Pontevedra), donde recibió el sacramento del Bautismo días más tarde. Hasta donde hemos podido saber, mis bisabuelos, Ramón y Dolores tuvieron un total de siete hijos: Manuel, Josefa, Ramón, Carmen, Enrique, Florentina y Peregrina. La casa natal donde nació mi abuelo aun sigue en pie y en ella vive actualmente Rosa, una prima de mi padre. Poco sabemos por ahora de la infancia de nuestro abuelo, pero imaginamos que se dedicaría a cultivar el campo como la mayoría de las familias que habitaban aquella zona.

lunes, 14 de septiembre de 2015

Distribución apellido PIDRE en España

Según los datos del INE, recogidos en el Padrón a fecha de 1/1/2014 los PIDRE nacidos en cada provincia española son:
Pontevedra: 100 como primer apellido y 126 como segundo
Cádiz: 18 como primero y 14 como segundo
Otras provincias: 16 como primero y 11 como segundo.
¿Quiénes son estos 285 Pidre?

sábado, 12 de septiembre de 2015

El Cádiz de mi bisabuelo Juan Bocardo Patrón

El padre de mi abuelo materno se llamaba Juan Bocardo Patrón (Cádiz, 10 de enero de 1887 - 24 de febrero de 1969) vivía en Puertatierra, en el Barrio de San José. Era el mayor de 8 hermanos (Carmen, Rosario, Antonio, Rosa, África, Manuel y Amador). Por aquel entonces, extramuros era una zona de huertas, viñas y frutales; y ocupada principalmente por casas bajas. La gente de Cádiz (zona de intramuros) se iban de paseo a Puertatierra para pasar un día de campo.


El blasón del apellido BOCARDO

He encontrado alguna información más sobre el blasón del apellido Bocardo. Aquí os la dejo.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

El blasón del apellido PIDRE

Hace más de 20 años que en la pared de nuestra casa de Chiclana luce un cuadro encargado por mi padre. La verdad es que no sé como fue la historia, sólo que mi padre encargó a la empresa Comercial Blasón SA unos azulejos de Talavera donde se mostraran los blasones de nuestros apellidos: PIDRE y BOCARDO.

Acompañando al cuadro venía un libreto donde se describían dichos blasones. Aquí he reproducido el del apellido PIDRE.

domingo, 6 de septiembre de 2015

¿Quién fue el primer gaditano o gaditana?


Hemos comentado en anterior entrada que Cádiz ha sido cruce de caminos donde antepasados de distintas regiones y países han confluido y han dado lugar a nuestra familia. Pero ¿quién de ellos fue el primer gaditano o gaditana?.
Aún nos queda mucho por investigar, y muchos archivos que estudiar, pero ya existe algún que otro candidato.

sábado, 5 de septiembre de 2015

Árbol genealógico de los hermanos Pidre Bocardo


Ya que estamos escribiendo sobre nuestros antepasados pensamos que para ir situándonos no está mal que vayamos poniendo nuestro árbol genealógico a medida que vayamos completándolo.

Aquí os ponemos el de 4 generaciones (hasta nuestros bisabuelos). De algunos antepasados ya tenemos localizadas las fechas y lugares de nacimiento y fallecimiento, de otros estamos en ello.

Por parte de mi abuelo materno, Juan Bocardo, aparecen sus dos esposas (nuestras dos abuelas maternas).



¿Porqué "Un Cruceiro en Cádiz"?

El pasado agosto fuimos a pasar unos días a Galicia, la tierra de mi padre. Coincidimos con mi primo Manolo, y fue en uno de los muchos rincones que recorrimos donde surgió la idea de titular al Blog "Un Cruceiro en Cádiz".

Concretamente fue a los pies del Cruceiro do Hío, en Cangas (Pontevedra).


viernes, 4 de septiembre de 2015

Genoveses en Cádiz: el primer Boccardo gaditano.

El primer antepasado Bocardo del que se ha obtenido información es Domingo José Liborio Bocardo, nacido en Génova (Italia), aproximadamente sobre 1.780. De ocupación jornalero.
La presencia de ligures (Ligur era la región italiana que tenía como capital a Génova) en la Península Ibérica era muy evidente desde la Edad Media. Muchísimos fueron los que emigraron de esa región italiana a la floreciente ciudad de Cádiz; bien para instalarse en ella y mejorar su nivel de vida, bien como escala hacia los países americanos.


Apellido ANTÓN



ANTÓN. Es un apellido castellano. Fue muy común en toda la península, pero, como ocurre con los patronímicos, las distintas ramas no tienen un mismo origen. Los Antón más numerosos se encuentran en diferentes poblaciones de Madrid.


Apellido BOCARDO


Bocardo, apellido de origen italiano, también escrito Boccardo. En España, tienen su principal asiento en la provincia de Cádiz. De hecho, un tal Juan Bocardo Pesio, hijo de una familia de mercaderes italianos establecidos en San Fernando (Cádiz), ya fue bautizado en dicha localidad en 1.699, casando en la misma, el 29 de septiembre de 1.732 con Nicolasa Noé Martín. 


Apellido PIÑEIRO

Significa PINO en GALLEGO.


miércoles, 2 de septiembre de 2015

La abuela desconocida: Consuelo Antón Cougil

Aunque sabíamos de su existencia, le verdad es que mi abuela por parte de madre siempre ha sido nuestra gran desconocida. Mi madre, Beatriz Consuelo Bocardo Antón, lamentablemente no llegó a conocerla ya que nada más darle a luz (23 de febrero de 1942) enfermó de tuberculosis y hubo de ser ingresada en el Sanatorio para dichos enfermos de Martiherrero (Ávila). Allí murió el 2 de enero de 1944.


La Santidad de la abuela Amalia

“… Era lunes. Santomé amanecía bajo una intensa lluvia. El lodo y la hojarasca se amontonaban en el lado sur del atrio parroquial. La cocina de hierro ya estaba en funcionamiento y el calor se hacía un hueco en la casa. Amalia preparaba la cesta de manzanas que debía vender hoy en el mercado de Bueu. No tenía pensado bajar hasta la semana que viene, pero la llegada del frío y de la lluvia había aumentado la venta de tabaco en el almacén y la provisión estaba a punto de acabarse. Era una larga caminata, pero las autoridades habían decidido establecer la distribución de tabaco en Bueu, en lugar de Marín. No era lo mismo. El camino era un poco más complicado. Y con la lluvia tendría que dar un rodeo.





miércoles, 26 de agosto de 2015

Apellido PIDRE

Pidre, es la variante gráfica local de Pedre que a su vez es derivado del apellido raíz original Pedro (nombre del Apóstol). De Pedro deriva Pérez, apellido de los más distinguido en el mundo hispano. En la lengua francesa equivaldría a la voz Pierre. En español hay un número grande de variantes con el mismo origen tales como, Peres, Peiro, Pérez, Pedre o Pidre.

martes, 25 de agosto de 2015

Juan Bocardo Madariaga. Una vida al servicio de la Armada (1ª parte)


Mi abuelo Juan nació el 31 de enero de 1915, en Cádiz. Concretamente en el callejón Escalzo del Barrio de San José de Puerta Tierra (la zona de extramuros de la ciudad de Cádiz). Sus padres y familiares vivían y trabajaban en ese barrio, y aún hoy seguimos allí.